Podemos estudiar todo lo que está vivo, tanto seres macroscópicos (ej. animales, plantas, hongos) como microscópicos (ej. algas, bacterias, virus), y también lo que estuvo vivo alguna vez, los restos que dejó, o sus rastros y señales.

Este estudio incluye identificar, agrupar, clasificar, analizar, evaluar la diversidad de vida, ya sea desde el nivel molecular, celular, de órganos, organismos, hasta niveles más complejos de paisaje o región.

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Podemos trabajar en universidades, institutos, museos, parques nacionales, laboratorios clínicos y genéticos, zoológicos, jardines botánicos, empresas de consultoría ambiental, incluso en medios televisivos sobre biodiversidad.

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Algunas de las actividades que podemos hacer incluyen:

• Ayudar a la conservación de las especies.

• Controlar plagas y vectores de enfermedades.

• Entender el origen de enfermedades humanas.

• Analizar la calidad del aire, agua, suelos y remediarlos en caso de contaminación o deterioro,

• Planificar estrategias de conservación de los recursos naturales,

• Estudios de impacto ambiental.

• Actividades biotecnológicas y de mejoramiento genético.

• Asesorar en el diseño de políticas y diseñar planes de manejo para la conservación de la biodiversidad y el medio ambiente.

• Diseñar y ejecutar proyectos de turismo.